Ese es el preciso instante donde el espíritu decide quitarse
la venda definitivamente y comenzar a expresar su verdadera esencia…
Los recuerdos se suscitan unos tras otros como una catarata
de imágenes y sensaciones que avalan los anhelos más profundos y jamás
contados.
Contacto con otros planos, signos, señales, y confirmaciones
comienzan a moldear la vida del Espíritu despierto y activo, decidido a ayudar
a quienes aun no se han animado a quitarse los velos, o peor aun, que habiendo
sentido estas sensaciones no se animan a destapar la voz del espíritu…
El pasado se suicida rápidamente para renacer aquí y ahora
en el mundo que “concientemente” comienza a crearse…
Este mundo perfecto al que se aspira, conocido para el alma
por haberlo vivido en esferas superiores, comienza a anclarse entre las sombras
y desechos de un mundo ignorante que inevitablemente debe darle paso a la
sabiduría del futuro.
Si tu espíritu siente ganas de gritar, libéralo y permítete
de una vez por todas seguirlo, en definitiva es por quien has encarnado y has
prometido llevar adelante una partecita del rompecabezas que hoy se está casi delineando.
Como Humanidad no somos solo imprescindibles, sino
indispensables.